Ofelia Alicia Cassano

Juicio por "El Vesubio" - visiónsiete

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Ofelia Alicia Cassano

Ofelia Alicia Cassano
Nació el 19 de Abril de 1949 en la ciudad de Buenos Aires, Argentina. El 23 de Marzo de 1977 fue detenida convirtiéndose desde ese momento en una desaparecida. Tenía 27 años. Sus restos fueron recuperados e identificados el 2010.

"Luces y sombras"

"Luces y sombras"
Gabriela Cassano (2007)
Contacto:
Gabriela Cassano
Buenos Aires, Argentina
gabrielacassano@gmail.com

El recuerdo de Ofelia Alicia Cassano

Por Ana Lía Cassano *

Alicia, nuestra querida hija, hermana, tía y compañera desapareció el 23 de marzo de 1977. Tenía 27 años, cumplió los 28 en el campo de concentración El Vesubio, nueve días antes de su salvaje asesinato por decisión del coronel Duran Sáenz y los delincuentes que lo rodeaban, con los que asesinaron sin límites, sin juicio, sin razón, robaron bienes y robaron hijos, todo en nombre de una supuesta guerra santa. Hoy, a 34 años del golpe todavía se desconoce el paradero de miles de compañeros; dolorosamente y con una enorme dedicación los organismos de derechos humanos, Madres, Abuelas, Hijos y el Equipo de Antropología Forense intentan llenar ese pedazo de la historia aun a costa del inmenso desconsuelo.

Ella fue una víctima más de la locura e indiferencia de una nación a la cual siempre le costó reconocerse como tal. Por eso se sumó a una lucha, harta de golpes militares, harta de injusticias, harta de proscripciones arbitrarias, y la sostuvo hasta el final, hasta poder decirles con toda su voz de condenada que eran unos asesinos y la historia los juzgaría. Alicia, una vez más no te equivocaste, la historia los está juzgando, por supuesto que no es suficiente, nosotros, que te perdimos, quisiéramos mucho más que eso. Una vez más tenemos que conformarnos y sentimos que el precio fue muy alto. No olvidamos, no perdonamos.

Es difícil hablar de Alicia sin que todo parezca exagerado porque ella, sin eufemismos, honró la vida a cada paso. Mejor alumna, mejor compañera, mejor amiga, mejor promedio en su carrera universitaria, mejor defensora de pobres y ausentes, desde muy joven no toleraba la injusticia. Su compromiso con la sociedad fue siempre claro, desde los 14 años fue voluntaria en la Casa Cuna donde terminó de definir su vocación por la medicina. Cuando en la década del ’70 se expanden en Argentina los movimientos revolucionarios en busca de justicia social, no pudo quedarse al costado. Su paso por la militancia fue breve pero muy intenso, como todo lo que hizo, ya que no tenía escalones en sus decisiones. Con Pepe convivían desde un año antes de ese 23 de marzo de 1977, fueron detenidos simultáneamente, él fue asesinado en el momento de la detención, ella fue vista durante un mes más viva en El Vesubio.

Cuando entendió que tenía que comprometerse, lo hizo sin medias tintas, no vaciló en dejar de lado sus logros personales. Para ella, la vida fue un desafío y así la encaró desde el principio al fin, por eso fue capaz de decirle a Durán Sáenz y sus convidados que eran “todos criminales” y que “la historia no los iba a perdonar”. Por el testimonio de los sobrevivientes de El Vesubio supimos que al día siguiente fue trasladada. Alicia no bajó la guardia. Tomó el camino de enfrentarlos y lo sostuvo hasta el final. Además del dolor que su pérdida nos produce, su historia nos enorgullece. Alicia honró la vida.

* Texto leído en nombre de Gabriela Cassano, Ofelia Cambiaggio, Roberto Zoppi, Marcos Zoppi, María Zoppi, Lucia Pereira, Ignacio Pereira, Victoria Pereira, Osvaldo Pereira, al inhumarse los restos de Ofelia Cassano en el Cementerio de Pilar.

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Mis compañeras

Mis compañeras
beben el vino manso del pueblo
cantan canciones de amor y guerra
tan ardorosas como sus dueñas

Mis compañeras
inquebrantables, puros sinceras
como quijotes jamás vencidas
tiran abajo molinos viejos

Dejan el alma en todo momento
en lo infinito del sentimiento
con alegría casi insolente
mientras construyen días tras día
las esperanzas de tanta gente

Sin concesiones, sin aspavientos
pero entregándose por entero
van por la vida, mis compañeras

Mis compañeras
de las canciones y el pensamiento
de las batallas y los esfuerzos
por el futuro que merecemos

Mis compañeras
de la poesía y la justicia
de las banderas y las consignas
del amor por todo ¡qué maravilla!
Teresa Parodi

Con mucho cariño, nuestros mayores abrazos por Ofelia Alicia, por sus seres queridos, amigos y compañeros.
Mirta Clara. Familiar de la Masacre de Margarita Belén
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